Declaración del Primer Congreso Oaxaqueño de Periodistas

ESTA SECCIÓN NO FIJA LA POSICIÓN DE REVOLUCIONEMOS OAXACA, SINO QUE BRINDA UN ESPACIO A CUALQUIER PERSONA, ORGANIZACIÓN SOCIAL, DEPENDENCIA DE GOBIERNO, ETC. QUE QUIERA DAR A CONOCER INFORMACIÓN QUE CONSIDERE RELEVANTE. LO QUE AQUÍ SE PUBLICA ES REPONSABILIDAD DE QUIEN LO ESCRIBE.

Asociación de Periodistas de Oaxaca, A.C.
1 y 2 de diciembre de 2007

Unidad en la pluralidad

Durante los días 1 y 2 de diciembre, a convocatoria de la Asociación de Periodistas de Oaxaca, bajo el lema: Periodismo, privilegio, responsabilidad y riesgo, un grupo plural de periodistas miembros de la organización e invitados provenientes de las distintas regiones del estado y aún de otras partes del país, con participación en medios electrónicos, impresos y virtuales, nos reunimos para realizar un ejercicio de discusión, con el propósito de comprender y en la medida de lo posible avanzar en la solución de las distintas problemáticas propias de esta actividad asumida como una responsabilidad y un compromiso social.

Como producto de este encuentro conmemorativo de los 30 años de la fundación de la APO, las y los participantes tratamos en este documento resolutivo de rescatar sobre todo las coincidencias encontradas en los dos días de discusión y análisis realizados en el marco inmejorable de la Hemeroteca Pública “Néstor Sánchez”.

Las coincidencias están, pues, en la necesidad de enfrentar problemas íntimamente correlacionados y en los que los periodistas decidimos asumir nuestra parte de responsabilidad para, como dijera uno de los participantes “cambiar el sentido de la ecuación”. Estos problemas son: impunidad ante crímenes contra periodistas, falta de unidad gremial, ausencia de capacitación y las negativas condiciones de trabajo.

Para llegar a estas coincidencias, los participantes realizamos mesas de trabajo cuya apretada síntesis se expone a continuación:

En la mesa de trabajo relativa al ejercicio periodístico desde las regiones, se puso de manifiesto la precariedad laboral y el riesgo proveniente de los poderes fácticos (cacicazgos y delincuencia organizada) que atentan no sólo en contra de la libertad de expresión, sino también y sobre todo, de los trabajadores de los medios de información. Al respecto, la reflexión puso de manifiesto la desunión gremial e incluso el sectarismo como debilidades que potencian la indefensión del periodista. Al respecto el pronunciamiento general fue la necesidad de procurar la unidad en un plano de respeto a las diferencias tanto para demandar un alto a la impunidad ante las agresiones sufridas por trabajadores de los medios de comunicación como para inhibir tentaciones represivas. En particular, los asistentes condenaron la patente de corzo que la Suprema Corte de Justicia de la Nación otorgó a quienes atentan contra periodistas en particular y contra la libre expresión en general, esto en el marco de la resolución del caso Lidia Cacho donde se exculpó al gobernador Mario Marín a pesar de las evidentes violaciones a la Constitución. En general, la exigencia fue poner un alto a la impunidad no sólo en atentados cometidos contra periodistas, sino de la sociedad en general, hechos ambos que son más propios de un estado autoritario que de uno democrático.

Se puso también de relieve la irrupción de una nueva modalidad de medios de comunicación: los diarios digitales o electrónicos y aún los blogs. Al respecto se ponderó el uso de esta nueva herramienta como una alternativa para los periodistas y lectores ante los medios impresos y electrónicos tradicionales. Se reflexionó de cómo estos medios virtuales constituyen un espacio donde personas ubicadas en otras partes de la geografía mundial pueden acceder a información sobre lo que ocurre en la entidad. La mesa no dejó pasar por alto que esta accesibilidad constituye también un riesgo ante cuestiones como la desinformación y la propaganda, situaciones ajenas a la ortodoxia periodística.

Un tema polémico, que al mismo tiempo permitió una discusión que fue ejemplo de debate respetuoso fue la cobertura de los medios de comunicación al conflicto socio-político que se vivió en Oaxaca en el año 2006. El ejercicio fue enriquecedor por la dinámica de discusión en la que privó la crítica y la autocrítica respetuosa. Una de las coincidencias fue que el conflicto rebasó la capacidad de reacción de la sociedad en general, entre ellos los medios de comunicación. A la distancia, el mismo conflicto ha permitido precisamente ejercicios como el presente en el que se hace un replanteamiento precisamente del papel de los medios y los periodistas en el conflicto. El tema, sin duda, quedó abierto pues como se dijo ahí, falta tiempo para decantar y explicarse lo ocurrido. La única conclusión y coincidencia celebrada es que a raíz del conflicto la discusión y el debate son no sólo importantes, sino indispensables no sólo para entender las problemáticas sociales, sino para entender al otro y a los otros.

En el segundo día de trabajo se recalcó sobre la importancia de exigir al Estado garantizar el derecho a la información y la transparencia. También se resaltó la necesidad y conveniencia de impulsar la capacitación periodística. Esa situación forzosamente llevará a la autovaloración y consecuentemente a la posibilidad de exigir y/ o buscar mejores condiciones laborales. Esta capacitación sólo será posible en la unidad, a pesar de nuestras diferencias ideológicas.

Respecto de la ética periodística y para cerrar el círculo y la interrelación de las distintas problemáticas del gremio se dejó entrever la necesaria relación que existe entre este tema y los relativos a la capacitación, profesionalización y la unidad.

Por último, pero firmemente los asistentes al Primer Congreso de Periodistas de Oaxaca

¡Exigimos!

A las autoridades estatales y federales correspondientes castigo a los responsables de los atentados contra los compañeros: José Antonio Illescas, Tomás Martínez, Jorge Pérez, Luis Fernando Pacheco y Othón García Díaz por parte de autoridades policiacas; así como demandamos el esclarecimiento del asesinato de Bradley Rolland Will y Raúl Marcial Pérez, asi como los atentados que han sufrido Benjamín Fernández, Misael Sánchez Sarmiento, Alberto Fernández Portilla, Edwin Meneses Santiago, Hiram Moreno García y Abundio Núñez. También condenamos la impunidad que prevalece tras los asesinatos de los voceadores: Flor Vásquez López, Agustín López y Mateo Cortés Martínez, en el Istmo de Tehuantepec.


Oaxaca de Juárez, Oax., a 2 de diciembre de 2007

Correo: aperiodistasoaxaca@hotmail.com